La filósofa queer Beatriz Preciado, a quien recordamos organizando performances con ex actrices porno en el Macba de Borja-Villel, acaba de quedar finalista del premio Anagrama de ensayo, con su libro "Pornotopía" -que se publicará a mediados de mayo-, donde analiza la construcción de una utopía doméstico-arquitectónico-sexual por parte de Hugh Hefner y la revista "Playboy" en los tiempos de la guerra fría. La investigadora, formada en Princeton, y que presume de inyectarse hormonas masculinas por sus benéficos efectos, intentó acceder a los archivos de "Playboy" en EE.UU, pero las exigencias de la revista fueron tantas en relación al contenido del futuro ensayo que Preciado optó por escribirlo desde el exterior. Eso sí, consiguió que un "topo" en el interior del imperio "Playboy" le suministrara informaciones y documentos que han resultado muy valiosos a la hora de confeccionar el libro. ¿Un traidor a Hefner movido por la admiración hacia la alternativa obra de Preciado? Bueno, tal vez haya habido algo de eso pero, en realidad, hubo motivos más prosaicos: la "garganta profunda" recibió dinero a cambio. ¿Cuesta llegar a fin de mes con los sueldos que paga el octogenario Hefner? (en la imagen, Preciado, cuando llevaba perilla, junto a la escritora francesa Virginie Despentes)
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